Si has sido engañado con un fraude no es tu culpa
Si has sido engañado con un fraude no es tu culpa Estafas y fraudes
Tal vez algunos observadores no sean conscientes de que la manipulación emocional de algunos delincuentes es extremadamente sofisticada, dice Christine Kieffer, directora sénior de FINRA Investor Education Foundation y coautora del informe. "Los estafadores son habilidosos", señala. "Utilizan todo tipo de motivaciones emocionales y tácticas de persuasión para influir en las personas para que entreguen voluntariamente su dinero... de modo que [las víctimas] toman una decisión emocional y no utilizan la lógica". Las personas ajenas pueden tener la reacción poco empática de "eso nunca me pasaría a mí", añade Kieffer, "en parte porque es difícil para quienes no sufrieron la estafa conectarse realmente con lo que la víctima estaba pasando emocionalmente". Stokes lo compara con la forma en que las personas reaccionan, por ejemplo, ante un robo en el hogar. "Es probable que los amigos y familiares de la víctima corran a asistirla. Si eres el blanco de una estafa, la empatía y el consuelo no son lo primero que experimentas". Puedes enfrentar una reacción como esta: ¿Te has dejado engañar por algo así? ¿Pero qué pasaría si nos refiriéramos correctamente a una estafa como un robo? Los titulares de arriba se leerían, por ejemplo:
Dejemos de culpar a las víctimas de las estafas dice un nuevo informe de AARP
Los defensores insisten en que debemos cambiar la forma de hablar y pensar sobre el fraude financiero
GETTY IMAGES "Personas estafadas en la compra de apartamentos en Miami Beach"Víctimas pierden $13 millones en inversión fraudulenta en vino
Estos son los titulares de las noticias más recientes sobre víctimas de fraude. Lo que tienen en común: el lenguaje que culpa sutilmente a las víctimas y, por lo tanto, minimiza la gravedad del delito. Y es muy común en las discusiones sobre el fraude financiero, dice "" (Culpa y vergüenza en el contexto del fraude financiero —en inglés—), un nuevo informe de la Red contra el Fraude, de AARP y FINRA Investor Education Foundation. Heart + Mind Strategies organizó el proyecto. "No pretendemos causar daño con nuestras palabras", dice Kathy Stokes, directora de Programas de Prevención de Fraudes, de AARP. Sin embargo, a menudo culpamos inconscientemente a la víctima, explica, y esto puede exacerbar los sentimientos de vergüenza que contribuyen a su resistencia a denunciar estos delitos. A veces, las víctimas también utilizan un lenguaje de autorreproche: "fui embaucado, engañado, estafado", dice Stokes, "pero tienen que entender que no es su culpa". Obtén acceso al momento a descuentos, programas, servicios y toda la información que necesitas para mejorar tu calidad de vida. Los autores sostienen que, cambiar como habla nuestra sociedad del fraude financiero, dejando de culpabilizar a las víctimas, podría conducir a un cambio muy necesario en la forma de pensar y combatir este creciente delito, que ya les cuesta miles de millones de dólares al año a las personas en el país. Según la Comisión Federal de Comercio (FTC), el fraude financiero ascendió a $5,900 millones en el 2021, aunque expertos como Stokes creen que el verdadero costo es mucho mayor porque muchas víctimas se sienten demasiado avergonzadas para presentar una denuncia. El informe reveló que, aunque la mayoría (85%) de las personas creen que el fraude puede ocurrirle a cualquiera, el 53% identifican a las víctimas como culpables y responsables, según una encuesta realizada entre 1,000 adultos en el país. Entre las razones citadas se encuentra la tradición estadounidense de recio individualismo, así como las suposiciones sobre las víctimas, especialmente las que son personas mayores, dice Stokes. "Se da por hecho que el fraude solo afecta a los adultos mayores. El problema se atribuye a su edad, a que no son expertos en tecnología o a que están demasiado dispuestos a responder al teléfono, o experimentan algún tipo de deterioro cognitivo. Permite que los demás pensemos: 'Eso nunca me pasaría a mí'". De hecho, los datos de la FTC muestran que los adultos más jóvenes denuncian el fraude y las pérdidas mucho más que los . Solo que cuando los adultos mayores son el objetivo, pierden mucho más dinero. Acabar con la vergüenza y la culpa: por qué es importante Más víctimas denunciarán el delito Se protegerán las relaciones familiares La policía reconocerá las estafas como delitos Los fiscales se encargarán de más casos de fraude Los legisladores actuarán para hacerle frente a esta plaga Alrededor de un tercio (32%) de los encuestados estuvieron de acuerdo con la afirmación: "Francamente, si eres objeto de un fraude... gran parte de ello es tu culpa".Tal vez algunos observadores no sean conscientes de que la manipulación emocional de algunos delincuentes es extremadamente sofisticada, dice Christine Kieffer, directora sénior de FINRA Investor Education Foundation y coautora del informe. "Los estafadores son habilidosos", señala. "Utilizan todo tipo de motivaciones emocionales y tácticas de persuasión para influir en las personas para que entreguen voluntariamente su dinero... de modo que [las víctimas] toman una decisión emocional y no utilizan la lógica". Las personas ajenas pueden tener la reacción poco empática de "eso nunca me pasaría a mí", añade Kieffer, "en parte porque es difícil para quienes no sufrieron la estafa conectarse realmente con lo que la víctima estaba pasando emocionalmente". Stokes lo compara con la forma en que las personas reaccionan, por ejemplo, ante un robo en el hogar. "Es probable que los amigos y familiares de la víctima corran a asistirla. Si eres el blanco de una estafa, la empatía y el consuelo no son lo primero que experimentas". Puedes enfrentar una reacción como esta: ¿Te has dejado engañar por algo así? ¿Pero qué pasaría si nos refiriéramos correctamente a una estafa como un robo? Los titulares de arriba se leerían, por ejemplo: